Gerald Américo Oropeza López, conocido en su momento como ‘Tony Montana peruano’, estuvo 7 años en prisión por ser coautor de delitos de tráfico ilícito de drogas y lavado de activos.

Sin embargo, ya lleva 2 años en libertad y se dedica a hacer batallas en TikTok, red social en la que tiene más de 345 mil seguidores.

Según El Comercio, el caso Oropeza comenzó el 1 de abril de 2015, cuando una camioneta Porsche valorizada en más de US$240 mil fue atacada con 24 balazos y dos granadas en San Miguel. El blanco era Oropeza, quien desapareció del mapa tras el atentado. Era un ajuste de cuentas.

Hasta entonces no era un personaje conocido, pero el atentado contra su vida provocó una serie de investigaciones periodísticas, policiales y judiciales que lo convirtieron en «famoso».

Durante meses fue uno de los hombres más buscados del país, hasta que fue capturado y privado de su libertad en setiembre de 2015.

En 2022, el Poder Judicial otorgó comparecencia con restricciones a Oropeza, dejándolo libre e impugnando los 6 años de cárcel que le esperaban, pues su defensa argumentó que ya había cumplido con la condena al encontrarse confinado desde 2015. Por ello, hoy está libre de cargos.

Actualmente, Oropeza es un creador de contenido exitoso.

En TikTok, exhibe fajos de billetes, celulares de último modelo y apoya a las personas que le hacen donaciones. Los comentarios que le dejan sus seguidores suelen oscilar entre la admiración y los pedidos de ayuda.

«Siempre pendiente desde mucho antes, quería hablar contigo. Estoy pasando por una injusticia por intento de feminicidio», escribió un usuario.

Oropeza respondió que le escriba por privado y acompañó el mensaje con emojis de pistola. Dicho comentario fue borrado posteriormente, pero como ese hay muchos más donde le piden favores, ya sea dinero u otras cosas.

Otra muestra de su éxito en redes es el video que supera los 7 millones de vistas, en el cual muestra que, para el cumpleaños de su hijo, llevó al cantante colombiano Maluma, cuando éste todavía no era tan famoso.

Entre los más de 4 mil comentarios recibidos, destaca uno que hace referencia a determinados métodos delictivos: “el patrón lo amenazó de muerte”. “Algo así, no malees [emojis de risa]”, respondió Oropeza.

Pero también gana dinero como creador de contenido, pues TikTok tiene una opción conocida como las batallas en vivo, competencias en tiempo real en donde dos o cuatro usuarios se enfrentan entre sí mediante diversos retos, bailes o NPC (avatares que actúan de manera robótica e imitan los movimientos con frases repetitivas), entre otros.

Los usuarios pueden hacer «regalos», los cuales están representados por íconos como león, galaxia, pegaso, unicornio, gatos, entre otros.

Cada regalo tiene un valor monetario. Por ejemplo, una rosa puede valer un centavo de dólar, pero un león equivale a S/1594.63.

Las batallas duran cinco minutos, tiempo suficiente para que Oropeza gane más de un sueldo mínimo así de fácil.

«Es una oportunidad de trabajo para mantenerme y estar bien», ha dicho. .

Oropeza hace batallas diarias y su comunidad llamada “los pericos” lo apoya en cada batalla que hace.

Sus seguidores buscan quedar como MVP (jugador más valioso, por sus siglas en inglés). Quien queda entre los tres primeros puestos, recibe un saludo personalizado de Oropeza, también conocido como ‘el patrón’, clara referencia al narcotraficante colombiano Pablo Escobar, ‘el patrón del mal’.

Por cierto, el nombre de “pericos” no es casual, pues en el argot callejero se llama «perico» a la cocaína.

Oropeza no es el único caso de un exdelincuente que se convirtió en tiktoker.

Un caso es el de Johan Cristhian Maza Quezada, conocido como el ‘ladrón burlón’, debido a su particular forma de responder tras haber sido arrestado varias veces por el Grupo Terna de la Policía Nacional por robo de celulares.

Después de cumplir tres meses de prisión preventiva en 2017, Maza decidió dar un giro a su vida: utilizar su popularidad en TikTok, donde cuenta con más de 22 mil seguidores y sus videos superan el medio millón de vistas.

Con respecto a Oropeza, nuevamente se ha posicionado como un personaje ligado a las celebraciones nocturnas y los lujos.

De hecho, ha declarado que utiliza la plataforma para promocionar sus eventos privados.

Un reportaje reciente sobre Oropeza ha resaltado su popularidad como organizador de fiestas a todo dar.

«Solo quiero ser libre», declaró.