
En una sociedad donde los animales suelen pasar desapercibidos, hay personas dispuestas a generar un cambio. Una de ellas es Lourdes Cárdenas, de 21 años, estudiante de Medicina Humana y amante de los animales desde pequeña.
En marzo del 2023, mientras cursaba sus estudios en la Universidad Científica del Sur, notó la presencia de perros sin hogar dentro del campus. Decidida a no ignorar la situación, fundó Helpets junto a un grupo de compañeras, un albergue que busca dar una nueva oportunidad a los animales abandonados.
Poco después, crearon una cuenta de Instagram, logrando que más personas conozcan y apoyen el proyecto. Actualmente, Helpets alberga a 12 perros en busca de adopción. Cada uno de ellos recibe cuidados diarios de voluntarios que se sumaron a la noble causa y de Lourdes, quien, a pesar de continuar sus estudios en otra universidad, sigue con la misma motivación con la que inició el refugio.
En sus redes contaron que Helpets empezó con Gringa.
Sí, Gringa era una perrita muy querida que era parte de la Científica. Un día nos dimos cuenta de que estaba preñada y poco después tuvo a once cachorros, por lo que era necesario conseguirles un hogar. Hicimos hasta lo imposible para dar en adopción a los perritos y lo logramos. Incluso Gringa, actualmente llamada Sandy, encontró una hermosa familia. Ella fue el impulso de seguir con el proyecto porque después llegaron más casos que necesitaban de nuestra ayuda.
¿Qué desafíos enfrentaron al iniciar con el refugio?
La falta de recursos como comida, ropa, camas y espacio. Un gran desafío fue la falta de conocimientos con relación al cuidado de los perritos. Hemos aprendido mucho gracias a la experiencia y con la ayuda de muchos veterinarios solidarios, quienes nos ayudaron brindándonos información y consejos.
En 100.pe contaron que tuvieron que dejar su antigua instalación el año pasado. ¿Cómo fue el proceso de encontrar un nuevo espacio para los perros?
Al inicio teníamos miedo porque no sabíamos qué hacer, pero abandonar a los perritos nunca fue una opción. Por ello, acudimos a la señora Ana, quien también ayudaba a los perros de la universidad y fue quien nos ayudó a conseguir el primer espacio. Nuevamente nos apoyó y brindó un nuevo lugar en Lurín, cerca de la playa y a 10 minutos de la Científica. Con esfuerzo, remodelamos el sitio y es donde estamos actualmente.
¿Cómo llegan los perros a Helpets?
Muchas veces nos contactan por medio de Instagram o WhatsApp. Tristemente, no podemos aceptar a todos por el tema del espacio, comida y otros recursos que nos faltan. Sin embargo, también llegan casos que no podemos simplemente ignorar como el tema de los atropellos. Así como sucedió con Vaquita, una perrita que tenía una fractura grave a nivel de su cadera porque la habían atropellado. Una de nuestras voluntarias se hizo cargo de casi toda la operación para que Vaquita se recupere y así fue.
¿Cuáles son los principales retos que enfrentan actualmente?
La falta de alimento es uno de los principales retos que tenemos, ya que en tres días se acaban una bolsa de veinticinco kilos. Así como la falta de medicina porque algunos perritos se lastiman con facilidad al estar cerca de la playa. También la falta de ropa, platos y camas, debido a que muchas veces terminan rompiéndolas por estar jugando. Otro problema que afrontamos son las adopciones lentas.
¿Cuál es el proceso para adoptar a un perro de Helpets?
Primero tienen que llenar un formulario que incluye preguntas como cuál es el domicilio y el motivo por el que desea tener una mascota. Después, tienen una visita al refugio para que conozcan al perrito y ver si realmente se llevan bien. Si es que la persona es apta y adopta, hacemos un seguimiento del caso por tres meses comunicándonos con el nuevo dueño. Todo esto porque queremos que sea una adopción definitiva y que el perrito se encuentre bien.
¿Recuerdas alguna adopción que haya sido especial para ti?
Sí, la adopción de Bianca a finales del año pasado porque estuvo con nosotros casi desde el inicio. Ella había sido atropellada y pensábamos que no volvería a caminar. Sin embargo, al estar cerca a la playa, la sacábamos a pasear y darle terapia, lo que hizo que lograra movilizarse de nuevo. Ver su recuperación y luego su adopción fue muy emotivo para nosotros.
¿Hay algún caso triste que aún recuerdes?
Sí, uno de los casos más dolorosos fue el de Dolly. Ella fue una cachorrita cuya mamá rescatamos y no sabíamos que estaba preñada. Incluso, la llevamos al veterinario, pero no nos informaron nada. Poco después nació Dolly, pero le dio parvovirus siendo muy pequeña. Las recaudaciones recibidas y el apoyo no fueron suficientes para que se sane, pues ella ya no se encontraba bien y murió.
¿Has sentido que las personas no comprenden el trabajo que realizas?
Muchas veces, porque piensan que solo recogemos perros o incluso que nos quedamos con el dinero que recolectamos de las rifas que hacemos para los perritos. No ven el esfuerzo que hay ni el dolor que implica ser rescatistas. Además, hay personas que son indiferentes y no empatizan con los animales, llegando al punto de atropellarlos y dejarlos tirados.
¿Alguna vez has pensado en rendirte y dejar el proyecto?
Sí, muchísimas veces porque es un trabajo que implica mucha responsabilidad y esfuerzo. Sin embargo, luego miro a los perritos y recuerdo el por qué empecé esto, lo que me motiva a no rendirme y seguir cuidando de ellos.
¿Qué le dirías a alguien que está pensando en adoptar un perro, pero todavía no se decide?
Que no lo piense más y que lo haga porque realmente adoptar cambia tanto la vida del perrito como nuestras propias vidas. Tener un perro te va a llenar el corazón como nada más lo va a hacer.
**Si te gustaría apoyar al refugio, puedes contactarte a través de su cuenta de Instagram: @helpets_01 ¡Toda ayuda es bienvenida!

Sobre Yanelly Yomona
Estudiante de Comunicación y Publicidad. Me gusta crear contenido con mensajes de valor. Disfruto ver películas, tomar fotos y conversar durante horas.