El mundo del entretenimiento digital ha cambiado y con él han surgido nuevas estrellas globales. Una de las más destacadas es el estadounidense Darren Jason Watkins (2005), más conocido como IShowSpeed o, simplemente, Speed. Más de 35 millones de personas lo siguen en Youtube desde 2018.

¿Qué tiene de especial? Para empezar, es excesivamente carismático. Basta con verlo comer frente a la cámara para sentir ganas de seguir viendo sus transmisiones.

También es impredecible. Puede estar caminando por la calle y, de repente, hacer parkour.

Ladra de manera inesperada, hace backflips (saltos para atrás) rodeado de personas y puede gritar desenfrenadamente sin razón aparente.

Ya sea a través de su explosiva reacción ante un videojuego o explorando nuevas culturas en vivo, Speed encarna la libertad y el desenfado.

“Es la verdadera libertad de expresión porque no tiene guion ni tiempo limitado”, dijo Porro que Ladra en el podcast Pitucos Marrones. 

Su ascenso no solo se ha limitado a internet. Ha lanzado canciones virales (como Shake, que supera los 221 millones de reproducciones en Youtube), recibido premios en el mundo del streaming y conocido a estrellas de talla mundial como Cristiano Ronaldo. 

Desde el año 2022, ha visitado Japón, Brasil, Arabia Saudita, Corea del Sur, Reino Unido, Italia, Colombia, Brasil, Uruguay, Paraguay, Argentina, Chile y varios países más. Según el mismo Speed, quiere conocer una cultura, en tan solo un día, lo máximo que se pueda.

Su experiencia en Lima comenzó a la 1 de la tarde en la Plaza de Armas. Más de 10 mil personas lo esperaban para verlo en vivo. Como es habitual en sus viajes, Speed delegó a un creador de contenido local la tarea de diseñar su recorrido, y en este caso, el elegido fue Zein, el streamer peruano con los mayores números en transmisiones en vivo.

La primera parada fue el Palacio Municipal de Lima, donde el alcalde Rafael López Aliaga le brindó un recibimiento digno de un embajador extranjero y, en un gesto simbólico, lo nombró “alcalde por una hora”. 

La euforia se desató cuando Speed salió al balcón del palacio municipal, un privilegio en donde Speed ladró, gritó como Cristiano Ronaldo y cerró con un backflip.

También dijo “my friend Porky”, en alusión al cuestionado alcalde.

A partir de ahí, el tour se convirtió en una carrera contra el tiempo para que Speed viva en pocas horas lo que a un turista le tomaría días. Probó un King Kong de Lambayeque con Inca Kola, degustó un suri y, pese a su resistencia al picante, disfrutó de un ceviche. En un encuentro con la cosmovisión andina, participó en una tradicional «limpia» con un cuy y fue testigo de la Danza de Tijeras en vivo, expresión cultural que lo dejó maravillado.

Mientras tanto, más de 400 mil personas seguían la transmisión en directo.

La jornada continuó en Gamarra, el emporio comercial más grande de Sudamérica. Speed entró a una galería y se vió envuelto en la energía del lugar sin entender del todo lo que sucedía. Para calmar el hambre, probó una salchipapa y un pollo broaster mientras se dirigía al Estadio Nacional, donde cerró su visita a Lima, exhausto pero feliz. 

¿Por qué es importante su visita al Perú?

La llegada de Speed es una oportunidad inigualable para la proyección del Perú en el escenario digital global. Durante más de tres horas de transmisión en vivo, miles de espectadores alrededor del mundo en distintas redes sociales vieron un extracto de nuestra cultura. El video de Youtube ya supera las 7 millones de vistas. Pocas veces un solo evento tiene el poder de posicionar a Lima y al Perú como un destino atractivo para los jóvenes viajeros. Oportunismo o no, el alcalde lo nombró “embajador turístico de Lima”.

“Perú ha sido el país número 1 en Sudamérica y el segundo a nivel mundial”, ha dicho Speed. Un testimonio que podría influir a sus seguidores para que descubran por sí mismos lo que nuestro país ofrece.

Por otro lado, es importante señalar que transmitir en vivo como lo hace Speed no es tarea fácil. Lo digo a partir de mi experiencia en transmisiones en la universidad. Vi que el personal de Speed usaba un router Starlink, el cual permite conectarse a internet vía satélite. Mediante una cámara DSLR adaptada a un celular, Speed transmitió por más de 3 horas y media sin parar. 

Eso no sería posible con una conexión celular estándar.

Por ejemplo, en espacios masivos como el Estadio Nacional o Gamarra, es normal que la señal se vuelva inestable y adiós al streaming. Entonces, moverse por el Centro Histórico de Lima con audio y video de calidad, con millones de espectadores contemplando el momento, lleva a considerar el futuro del streaming nacional. 

En ese sentido, Speed puede ser una inspiración para jóvenes creadores locales. Su caso demuestra que es posible entretener siendo auténtico. Es decir, los creadores peruanos pueden motivarse a salir a buscar historias y contarlas al mundo. No solo hablamos del reciente auge de los podcast a nivel nacional, sino del contenido IRL (in real life) que nos lleva en un viaje con el streamer. Speed nos demostró que solo necesitamos salir de casa y mostrar lo que vemos en la vida diaria.