Han pasado más de 2 años desde el inicio de la pandemia producto del COVID-19 en el Perú, un momento que, sin duda alguna, marcó un antes y después en nuestra sociedad. Para mitigar los efectos de la crisis sanitaria, las autoridades de turno tomaron diversas medidas y dentro de ellas, la que tuvo más impacto en el sector educativo fue la cuarentena impartida a nivel nacional y, posteriormente, las restricciones en torno a la asistencia presencial a colegios y universidades debido al aglomeramiento de personas que suele producirse en estas instituciones. Sin embargo, con la llegada de la ansiada vacuna que logró, de cierta forma, controlar el incremento de los casos de coronavirus, son varias las actividades que progresivamente van volviendo a la normalidad, entre ellas, el retorno a clases presenciales.
Siguiendo este lineamiento, la Universidad Científica del Sur abrió sus puertas y se sumó al regreso paulatino a la presencialidad, garantizando el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad. Para analizar el panorama actual basado en un formato de educación híbrida y hacer un paralelo entre la situación en el país y el extranjero conversamos con José Gabriel Chueca, docente UCSUR que también es profesor en la Universidad de Nueva York y en la Universidad del Estado de Nueva York en Stony Brook.
“Con la llegada de la pandemia las conexiones remotas empezaron a tomar gran importancia. Durante todo este difícil proceso, la tecnología estuvo ahí y ahora es mucho más valorada”, inicia José Gabriel Chueca, quien además nos comenta que, sin el uso de las herramientas tecnológicas, no podría dictar clases bajo la modalidad virtual en el Perú, un suceso que formaba parte de sus metas profesionales.
El paso de la educación tradicional al formato a distancia trajo importantes retos para toda la plana docente, quienes enfrentaban la complicada misión de brindar un servicio de calidad a los alumnos y, a su vez, incentivar la participación de estos en clase. “La nula experiencia de los profesores sumada a la resistencia inicial ante la enseñanza remota dificultaron aún más el proceso de adaptación. Ni siquiera las universidades con las herramientas tecnológicas más sofisticadas fueron capaces de resistir el cambio. De la noche a la mañana nos encontramos con miles de estudiantes rindiendo exámenes a través de las plataformas digitales que las universidades habían implementado. Lógicamente, el sistema se saturó. Los esfuerzos previos fueron insuficientes. En ese momento, nadie se encontraba preparado para lo que estaba pasando. Además, el impacto psicológico fue devastador. La vida como la conocíamos ya no sería la misma”, señala Chueca con relación a los primeros desafíos que las universidades debieron afrontar tras el pico máximo de la pandemia que forzó una cuarentena a nivel mundial.
Hay instituciones que han adoptado la política de presencialidad al 100%, sin embargo, por la propia coyuntura y las ventajas que supuso la virtualidad, es muy probable que la enseñanza universitaria se afiance en la metodología híbrida.
Además, otros problemas potenciales giraban en torno a la complejidad de cursar online asignaturas que requerían la presencia de los alumnos en las aulas, más aún, en aquellas relacionadas con las ciencias de la salud. También cobró importancia el implementar mecanismos de seguridad ante posibles plagios durante las evaluaciones. Pese a las dificultades que traía consigo la educación remota, muchos estuvieron en desacuerdo con el anuncio del retorno al campus. La costumbre y el miedo a la propagación del virus fueron algunos de los factores que determinaron esta negativa.
“Hay instituciones que han adoptado la política de presencialidad al 100%, sin embargo, por la propia coyuntura y las ventajas que supuso la virtualidad, es muy probable que la enseñanza universitaria se afiance en la metodología híbrida”, señala José Gabriel Chueca. Y es que, las clases a distancia facilitaron la interconectividad entre alumnos y docentes y permitieron que el acceso a la educación no tenga frontera alguna. Desde la comodidad de tu hogar puedes cursar alguna carrera en las más prestigiosas casas de estudios a nivel mundial, o bien, optar por el sistema híbrido, modelo que actualmente está en vigencia en las universidades nacionales. Además, gracias al boom de la educación a distancia, ofertas ya existentes en el mercado como las maestrías, diplomados o programas de especialización bajo la modalidad remota, lograron posicionarse.
¡Disfruta la entrevista completa!
Edición: Raquel Cabana
Sobre Vanessa Retamozo
Bachiller en Comunicación y Publicidad. Amante del cine, la literatura, la música y del arte en todas sus formas de expresión. Fiel creyente de que leer te transporta a otras realidades, independientemente de la plataforma que utilices para hacerlo. Experiencia en la creación de contenidos digitales y estrategias de inbound marketing. Escritora empedernida.