La vida de Marco Loret de Mola, como la de miles de peruanos, cambió radicalmente en 2020. Administrador de empresas egresado de la Universidad de Lima, dirigía tranquilamente MatLab —plataforma dedicada a la enseñanza de matemáticas con métodos innovadores— hasta que se decretó la primera cuarentena debido a la pandemia Covid-19.
En marzo de ese año empezó a publicar videos sobre la situación de la pandemia en Perú. De la enseñanza privada pasó a las audiencias masivas de Youtube para presentar en un pizarra cifras de contagiados, hospitalizados, vacunados, pruebas realizadas, disponibilidad de camas UCI, fallecidos. Números difíciles de asimilar, pero necesarios para tener claridad científica en momentos de incertumbre y desinformación. Mantuvo el ritmo por casi dos años, hasta que los dígitos y porcentajes permitieron decir que lo peor había pasado.
Tres años después de aquella primera cuarentena de «15 días», con un libro sobre finanzas publicado y el reconocimiento de la gente, Loret de Mola habla con 100.pe sobre matemáticas, educación y su faceta de youtuber.
¿Eras bueno en matemáticas en el colegio?
En primaria y secundaria tuve un muy buen profesor. O sea, tuve un profe en casa, el señor Cárdenas, que me brindó una relación positiva con las matemáticas. Luego, cuando estaba en la universidad, ingresé a trabajar en la academia Nivel A a los 17 o 18 años. Así empecé a enseñar mate. A medida que enseñaba, le fui sacando la lógica. Recién ahí me enamoré de las matemáticas.
¿Se puede decir que alguien es malo en matemáticas o es culpa del profesor?
Imagínate que en tu salón de clases venga el profesor y diga “okey, chicos, en la primera media hora haremos cosas que no sirven para nada”. Entonces tú dices “¿por qué no?”. Y así todo el ciclo. Es más, durante toda la carrera, sientes que la primera media hora de todas tus clases no sirve para nada y te hartas de eso. Lo cierto es que la matemática está presente en nosotros, pero lamentablemente la que enseñan en el colegio no es aplicativa. Al contrario, es muy de memoria, muy de procedimiento. La matemática es útil, pero te la presentan de forma inadecuada.
¿Qué le gustaría que se mejore en nuestro sistema de educación?
Un profesor debe ser una persona que la gente admire, un coach. Por eso tiene ser un profesional con muchos valores. Dudo que la mayoría de nuestros profesores peruanos considere eso como un eje central de su vida. Me gustaría que los profesores tomaran conciencia del poder que tienen sobre los alumnos. Si tuviéramos profesores con más valores y profesionalismo, otro sería el país.
Antes de marzo de 2020, ¿pensaste que serías youtuber?
No. Sorpresas que te da la vida. Pero si confías en Diosito y trabajas duro, te llegarán oportunidades. Y eso fue lo que pasó conmigo. Fue un cambio de vida completo. Mis hijos mismos me decían “papá youtuber”. Agradezco a Dios por la oportunidad que me dio, sobre todo para llevar claridad a la gente en una situación tan difícil como una pandemia.
¿Cómo te preparabas para cada video que publicabas?
El proceso era así: me comunicaba con mi papá, me daba la información y yo la ingresaba a mi cuadro que me arrojaba resultados. En el proceso conversábamos sobre los números y, finalmente, esos resultados los traducía a la pizarra. Borraba el número del día anterior y ponía el nuevo número. Luego, grababa unos 15 o 20 minutos, editaba, subía el video a Youtube, escogía la miniatura, ponía el texto, la musiquita o algún efecto especial si fuera necesario, y lo lanzaba. O sea, era trabajoso. A medida que iba creciendo la pizarra, cada vez me tomaba más tiempo. Al final, me demandaba unas tres horas de chamba diaria.
¿Alguna vez pensaste dejar la pizarra y Youtube?
No, para nada.
Si en caso ocurriera otra pandemia, ¿volverías a la pizarra?
No creo que vuelva otra pandemia. Ahora bien, si ocurre algo similar, si la gente lo necesitara y si hubiera la “ceguera” de aquel entonces, por supuesto que volvería a la pizarra. Ojalá que no, pues sería informar sobre enfermedad. Hubo días en los, paradójicamente, pensaba “ya no me vean, tómense un descansito”. Es que todo el día vimos muerte, dolor. Fue feo, me pegó duro. ¿Quién no quisiera comunicar cosas bonitas?
Has creado proyectos que requieren mucha persistencia como Matlab y los videos en pandemia. ¿Qué otras cualidades o herramientas son importantes para sacar adelante proyectos independientes?
Control de emociones: diría que es el punto número uno. Hay que aprender a conocerse, pues no somos seres racionales, sino seres emocionales. El punto número dos: perseverancia. Si quieren hacer cualquier cosa en la vida hay que ser perseverante. Otro punto: confiar mucho en Diosito y rezar. Funciona confiar en “el gringo”.
Sobre Daniel Castillo
Estudiante de Comunicación y Publicidad. Gracias a los cursos de periodismo he adquirido conocimientos para realizar entrevistas. Actualmente tengo una empresa dedicada a la fotografía y toda mejora aplicada es de lo aprendido en la universidad.