En un mundo al que le hace falta amor y respeto, ser voluntario es la oportunidad perfecta para vivir una experiencia llena de aprendizajes y valores. Vivir algo tan apasionado y profundo como formar parte de un voluntariado, independientemente del área al que se dirija el proyecto, traza un antes y un después de varias formas y, desde luego, cambia nuestra forma de afrontar la vida al volver a nuestra rutina diaria.

“Muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) exigen cambios de actitud y comportamiento a largo plazo. Los voluntarios facilitan los cambios en la mentalidad al crear conciencia o defender esos cambios e inspirar a otros” (El voluntariado y los Objetivos Mundiales, 2021).

Una de las principales finalidades de un voluntariado es desarrollar capacidades y habilidades, pero lo cierto es que la enseñanza que te llevas va mucho más allá de eso. Puedes leer libros, estar pendiente a las noticias diarias, ver documentales, pero ninguna de estas acciones se va a comparar con vivirlo en persona. Tener contacto con otra realidad es lo que verdaderamente impulsa a uno, empezamos a darnos cuenta de que nos preocupamos por cosas que no son importantes y que vivimos ignorando lo que de verdad importa sin hacer nada para revertir la situación. Conocer una realidad distinta te permite apreciar más lo que tienes. El mundo necesita acciones reales, no cambios superficiales que duren una semana.

Existen muchas alternativas desde donde poder ayudar, a continuación hago un recuento de alguna organizaciones, dirigidas a distintas áreas de interés, que cuentan con proyectos de servicio a la comunidad increíbles y donde, en algunos casos, yo misma he podido participar y contribuir a la sociedad.

Somos Servir es  un voluntariado que forma impulsores de solidaridad. En la pandemia surgió un nuevo proyecto llamado “Aprendiendo con Servir” que busca brindar una educación de calidad a escolares en situación vulnerable. Ofreciendo asesorías virtuales, gratuitas y personalizadas. Yo formo parte de esta magnífica iniciativa hace ya casi 4 meses, me dio la oportunidad de conocer a Nancy, una niña muy sabia y alegre que cursa quinto grado de primaria. Para mí es algo muy gratificante saber que puedo aportar en su educación y darme cuenta que, en cada sesión, fortalecemos un lazo de confianza y amistad excepcional.  Si tienes vocación de enseñanza hacia niños y adolescentes, Aprendiendo con servir, te ofrece un espacio para potenciar y mejorar estas habilidades de instrucción.

Por otro lado, está la Asociación KP Wasi que promueve la ayuda a refugios animales ubicados en nuestra capital, fomentando campañas de esterilización y salud de perros y gatos sin hogar. Ellos realizan visitas a distintos albergues llevando donaciones casi todos los fines de semana, aún no he tenido la oportunidad de formar parte de sus actividades pero es algo que tengo pendiente en mi agenda hace muchísimo tiempo ya que no hay nada más reconfortante que poder contribuir con los que no tienen voz para pedir ayuda. Así que si eres de las personas que disfruta de estar en compañía con estos pequeños, esta es la ocasión perfecta para sumarte como voluntario y ayudar a los amigos de 4 patas.

Asimismo, si tus intereses se inclinan más hacia la protección de la naturaleza, We can be heroes es una organización sin fines de lucro que se dedica a promover la conservación del medioambiente actualmente de manera virtual mediante difusión de proyectos y charlas informativas.

En último lugar pero no menos importante, ¿alguna vez te imaginaste ser un voluntario de la ONU? Pues sí, es posible. Periódicamente mediante su plataforma web publican convocatorias en distintas áreas y diferentes lugares del mundo. Ahora cuentan con voluntarios tanto en línea como presenciales. Échale un vistazo a las oportunidades que se adhieran más a tu proyecto personal.